sábado, 4 de agosto de 2012


ABRIRSE A LA GRACIA


Abrirse a la Gracia es la magia de abrirse al Universo y de fluir con el tal y como se nos presenta. Vivimos en un mundo totalmente interconectado y somos totalmente interdependientes en este Universo Multidimensional. Eso significa que de alguna manera estamos tan vinculados a este Universo que dependemos completamente de el para poder vivir. Es imposible la Separación. No existe, es inconcebible. La Naturaleza, a través de la Madre Tierra nos nutre, nos protege, nos alimenta. El aire que inhalamos nos abre y nos da vida, mientras que el aire que exhalamos nos permite liberarnos de las toxinas dañinas de nuestro organismo. La Naturaleza se encarga del resto.

De la misma forma que somos parte del Todo, el Todo  sabe y esta consciente de que nosotros formamos parte de él. En otras palabras, somos parte de Dios, somos Dios mismo, pero Dios esta consciente de que somos parte fundamental de su obra. Si eso no fuera así, no existiríamos ni tendríamos presente nuestra conexión con el. Dios no es masoquista, no crea las cosas por error y para sufrir. Si somos Dios, él no quiere sufrir por el gusto, de alguna manera todo lo que nos ofrece es la forma que él quiere que veamos para experimentar las distintas posibilidades de respuesta.  De alguna manera, sufrimos porque no fluimos con la vida. Sufrimos porque nos oponemos a la vida y no somos conscientes de lo que la vida nos ofrece. Aquí aplica perfectamente el símil del surfista que espera la ola para montarla, él se divierte con ella, la pasa bien, si es grande que bueno, si es larga mejor, si es pequeña, que se hace, y si es corta no hay mayor problema. A diferencia de quien no esta dispuesto a surfear las olas y esta en el mar, pues simplemente las olas lo van a revolcar y la va a pasar muy mal. Esto también nos dice que tenemos una tarea que cumplir y Dios nos indica con sus señales sutiles cual es la dirección correcta. Aprendamos a reconocerlas y a fluir en esa dirección.

Dios nos cuida, Dios nos protege, Dios es consciencia Total. Somos parte de la consciencia de Dios. Somos Dios en su consciencia. Fluyamos con la vida. Dejemos que la vida nos indique el camino y atrevámonos a seguirlo. Entendamos que de nada vale oponernos a las Leyes Divinas, las Leyes de Dios. Todo esta hecho, todo es, en este momento eterno.

Tenemos el potencial para crecer. Somos como la semilla de un árbol. Dentro de nosotros esta encerrada toda la información disponible para ser quienes debemos Ser. Solo nosotros somos responsables de desarrollar ese potencial. Nadie más puede hacerlo por nosotros. No permitamos que alguien nos limite y coarte nuestro potencial. Solo nosotros somos responsables de lo que hacemos y de como lo hacemos. Solo nosotros somos responsables de fluir con la vida tal y como ella se nos presenta. Aprovechemos las oportunidades y aprendamos a reconocerlas. Meditemos y conectémonos a esa Consciencia Universal que nos va a indicar hacia donde debemos ir, y que debemos hacer.



OMM

Sadashiva

1 comentario:

  1. Lograr la armonía entre Dios y nosotros quizás sea lo que debemos hacer en la vida, ya que si estamos en consonancia con Él, seremos uno con Él, y si Él tiene preparado algo bueno para nosotros, entonces, alcanzaremos nuestro máximo potencial.

    Y siguiendo estas ideas, ¿podríamos decir que somos unos dioses en potencia? ¿o es un poco pretencioso pensar así? ¿quién sabe?

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